Por Nancy Miriam Méndez Castañeda
Los alimentos transgénicos podrían ser riesgosos para la salud humana, pero por la falta de estudios científicos que lo determinen, se desconoce si provocan daños, señaló Greenpeace México.
Maíz, soya, granola, papa, jitomate, algodón y alfalfa son siete de los 31 los alimentos transgénicos aprobados en México para su consumo humano, pero no se ha podido comprobar que no provoquen daños a la salud en mediano o largo plazo, ni al medio ambiente, indicó Areli Carreón, coordinadora de la Campaña de Consumidores de Greenpeace México.
“No se han hecho investigaciones y no podemos saber si son dañinos, entonces, vamos, ante la duda el riesgo está, la forma en que se producen estos transgénicos es totalmente azarosa e imprecisa, simplemente se le avientan estos transgénicos a la planta y se pegan ahí”, dijo la ecologista.
Carreón explicó que los alimentos transgénicos son cultivos que han sido modificados genéticamente para agregarles genes de plantas, animales o bacterias en un laboratorio, de manera que no se distinguen.
“Nos hemos dado a la tarea desde marzo pasado de preguntarle a 50 compañías líderes en alimentos de México, les hemos preguntado formalmente si están utilizando ingredientes transgénicos en los productos que tiene a la venta”, dijo.
Precisó que harán pública la información una vez terminada de recopilar esta semana de las empresas Bimbo, Aceite 123, Nestlé, Coca Cola, Jumex, Jugos del Valle, Cervecería Cuauhtémoc, Danone, Kellogg’s, Maruchan, Maseca, Gerber, Sabritas, Pepsico, Yakult, Boing, Del Fuerte, Bachoco, Chocomilk, Herdez, La Costeña, entre otras más.
“La obligación de las empresas es certificar y garantizar que están utilizando ingredientes que son sanos y no tienen ningún tipo de riesgo ni duda”, manifestó, “es labor de los científicos y autoridades utilizar la investigación y las empresas tienen que pedirlo”.
Carreón destacó que son los consumidores quienes deben decidir sobre la adquisición y consumo de estos productos.
Apuntó que en una encuesta realizada por la empresa Sigma Dos, a 406 personas por vía telefónica en las ciudades de México, Guadalajara y Monterrey, el 98 por ciento opinó que las empresas tienen la obligación de informar a los consumidores si utilizan transgénicos.
“No se puede ocultar la información al público, el público es el que tiene que decidir”, acotó, “la Ley de Bioseguridad no obliga de manera clara y contundente a ponerles etiquetas a los productos, es una falla terrible”.
Greenpeace infló ayer un globo aerostático con la leyenda “Transgénicos en mi mesa ¡No!” en la explanada del Zócalo de la Ciudad de México en rechazo a estos alimentos.
Los Cadillacs
Hace 15 años.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario